Viajar nos hace felices por varias razones, pero principal mente porque en la mayoría de los casos nos hace estar aquí y ahora. Cuando estamos en una ciudad lejana que ansiábamos visitar, sabemos de antemano que no estaremos allí para siempre, que tenemos los días contados y hay que aprovecharlos .Eso nos hace disfrutar mucho más que cuando damos por sentado las cosas -Estamos más vivos, más presentes.